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Dos nuevas tecnologías que nos acercan más a la conducción autónoma


El Salón del Automóvil de Tokio que se inaugura mañana reunirá a los principales fabricantes de automóviles que mostrarán sus últimas novedades tecnológicas. Para este evento, Lexus ha anunciado la incorporación de dos tecnologías, que ya han sido probadas en condiciones reales, que permiten que el vehículo pueda circular autónomamente en vías urbanas.

El Control de Crucero Adaptativo Cooperativo (por sus siglas en inglés CACC) junto al Land Trace Control (LTC) han sido incorporados en uno de sus modelos para realizar una prueba en condiciones reales en hora punta en las calles de Tokio, con el permiso debido de las autoridades.

Según el redactor de la revista Autocar, que estuvo presente en la demostración, la combinación de ambos sistemas permite al conductor dejar que el propio vehículo circule por sí mismo entre el tráfico.

Gracias al CACC se controla la información de la velocidad y las maniobras de frenado del vehículo que circula por delante y manteniendo siempre la distancia de seguridad. El CACC utiliza una banda de comunicaciones (700 MHz) de vehículo a vehículo para la transmisión de datos desde el coche de delante a los que circulan detrás. Esto permite variar la velocidad del propio vehículo en función del tráfico que circula en ese momento. El sistema LTC de seguimiento de control de carril utiliza tres cámaras de alto rendimiento, un radar de onda milimétrica y un software de control para ajustar el ángulo de dirección del vehículo, el par motor y la fuerza de frenado para mantener una línea óptima dentro del carril. Este sistema mejora a los anteriores desarrollados por la marca puesto que permite tomar curvas más cerradas.

Para aumentar las funcionalidades de las conexiones vehículo a vehículo será necesario en el futuro establecer protocolos comunes de comunicación, para que todos puedan «entenderse» independientemente de marcas y modelos. Actualmente los fabricantes japoneses están iniciando conversaciones para estandarizar estos protocolos, algo que sería deseable que se hiciera extensible a fabricantes europeos y americanos.