Cómo usar la tecnología para eliminar las zonas con más accidentes de las ciudades


Al igual que en las carreteras, en las ciudades hay determinados puntos negros donde se concentran la mayor parte de accidentes ocurridos. ¿Qué tecnologías se pueden utilizar, y cómo utilizarlas, para tratar de eliminar estos puntos problemáticos en las ciudades?.

Esta pregunta la están tratando de resolver en Boston, y para ello han equipado con cámaras y sensores inalámbricos todos los cruces conflictivos de la ciudad. El objetivo es poder analizar las causas reales de los accidentes, comprobar qué soluciones funcionan mejor y, en definitiva, recopilar datos para poder obtener conclusiones.

En el caso concreto que nos ocupa, se han implantado 50 cámaras (alguna con visión total, otras móviles, algunas infrarrojas…en definitiva, de todo tipo) y sensores en cada intersección conflictiva, para poder obtener y filtrar datos en cualquier circunstancia: de día y noche, con buen tiempo y con lluvia o nieve, etc. Junto con esto, se han implantado sensores para deteminar la velocidad y el número de vehículos que circulan, así como mucha otra información.

Con todos los datos recopilados, entra en juego el software de análisis y simulación, que analiza las causas que provocan los accidentes, y combina todos los datos obtenidos para obtener conclusiones, determinar qué servicios funcionan mejor o peor, y qué medidas se podrían tomar.

Con toda esta información, los responsables cuentan con lo necesario para saber si es necesario organizar de otra forma la intersección (estableciendo prioridades de paso), si las frecuencias de los semáforos son correctos, o si es necesario una reordenación urbanística más compleja.

En definitiva, se consigue trabajar sobre datos reales, y sobre hechos concretos (no sobre suposiciones), que es la fórmula idónea para conseguir que no se repitan los accidentes en las zonas problemáticas.