Cada día somos más conscientes de los importantes problemas que puede producir la contaminación acústica (el ruido de los vehículos), asociados tanto a temas nerviosos (estrés, irritabilidad), como a otra serie de patologías («Nuevos problemas de salud asociados al ruido de los vehículos«, «Un estudio del instituto de salud Carlos III indica que el ruido del tráfico puede tener una relación directa con algunas muertes por diabetes«).
Esta mayor concienciación también ha llegado a las empresas, y cada vez vemos más proyectos que van en la línea de buscar fórmulas para conseguir reducir este ruido, y ofrecer una mayor calidad de vida a los usuarios de las ciudades.
Uno de estos proyectos en curso es F2URBAN, que se va a centrar en el estudio de materiales ligeros de última generación para la reducción de la contaminación acústica en las grandes ciudades.
En el proyecto, cofinanciado con fondos europeos y del CDTI, participan la empresa Becsa, el grupo de investigación acústica del Centro de Tecnologías Físicas (CTF) de la UPV e Isoltec.
Según leemos en la web de BECSA, la tecnología a desarrollar se basa en la aplicación del concepto de cerramientos ligeros multicapa a elementos flexibles como telas y membranas. Este trabajo persigue la mejora de las condiciones sonoras de nuestros entornos urbanos, y para ello pretende reducir hasta en 12 decibelios el ruido ambiental.