Para poder realizar una gestión eficaz de las actividades de conservación de la carretera, cuya función es mantener los elementos que forman parte de ella en el mejor estado posible, es necesario contar con un sistema informático que permita no sólo conocer el estado y características de cada elemento (es decir, el inventariado), sino poder almacenar, planificar y coordinar las diferentes inspecciones que se deben realizar.
Hasta la fecha, generalmente la gestión de la conservación ordinaria de las carreteras se realizaba con sistemas software independientes (entre los que destaca el sistema Terex), que funcionaban principalmente en modo local, ofreciendo un servicio integral para el control de estas actividades, pero sin tener en cuenta la necesaria integración con el resto de actividades a realizar para la explotación de las carreteras.
Gracias a los nuevos desarrollos realizados en el Sistema de Gestión Web de Carreteras de Iternova (SGWC), ahora ya es posible poder integrar completamente las actividades de conservación de la carretera con el resto de acciones de los operarios, así como conocer los costes de cada actividad, el estado de los diferentes elementos y la planificación de los trabajos a realizara para optimizar los recursos existentes.
Para ello, el módulo de conservación ordinaria cuenta con las siguientes funcionalidades:
- Inventario, que permite conocer las características de todos los elementos de la carretera.
- Programación de inspecciones o auscultaciones periódicas
- Permite conocer y evaluar el estado de los elementos de la carretera, en cuanto a su mantenimiento ordinario (se entiende que cualquier deterioro importante, que pudiera afectar a la seguridad de los usuarios, entra en el campo de la Vialidad).
- La programación de estas inspecciones, se basa en lo siguiente:
- 1.- Los operarios comprueban el estado de cada elemento, indicando la información existente en la ficha personalizada del elemento sobre los aspectos que se deben evaluar del mismo.
- 2.- Una vez se realiza esa comprobación visual, y esa estimación del estado de cada parámetro del elemento de inventariado, es necesario establecer una conversión de los datos de las inspecciones o de las auscultaciones en valores numéricos, denominados indicadores de estado. El motivo es que de esta forma se permite luego conocer cuáles son los elementos cuyo valor numérico es inferior al deseable, y de esta forma poder planificar los mantenimientos a realizar en aquellos elementos más necesitados de los mismos.
- 3.- El Órgano Gestor de la Carretera debe establecer los valores-límite de esos indicadores que está dispuesto a tolerar en su red de carreteras. Por tanto, cuando se programan los mantenimientos a realizar, todos los elementos cuyo valor sea superior al límite, deben ser reparados.
- 4.- Se realiza una programación de las actuaciones de reparación ordinaria necesarias para restablecer el elemento deteriorado a su estado inicial (normalmente para un plazo máximo de un año), gracias a la información del sistema que ofrece en detalle el estado de cada elemento, y prioriza los que son necesarios arreglar.
Mañana mostraremos un poco más en detalle el submódulo de inventariado, y el sábado daremos a conocer las características más destacadas del submódulo de inspecciones, dos elementos imprescindibles para la gestión eficaz de la conservación ordinaria de carreteras.