El Instituto Tecnológico de de Massachusetts y la Fundación Nacional de Investigación de Singapur se encuentran inmersos en el desarrollo de un proyecto que pretende ofrecer nuevas herramientas y modelos para la planificación, diseño y gestión del transporte urbano del futuro.
El eje central del proyecto es el sistema SimMobility, que se trata de una completa plataforma de simulación de las actividades humanas y empresariales, el transporte asociado a las mismas, el impacto ambiental, o el uso de la energía, entre otros múltiples elementos. Todos estos aspectos simulados serán tratados por un conjunto de herramientas analíticas diseñadas a medida para el proyecto, que permitan evaluar los diferentes parámetros en un amplio conjunto de escenarios, para poder tomar las decisiones adecuadas.
La idea que subyace del proyecto es la siguiente: ¿Podemos aprovechar la tecnología existente en este momento para mediante la simulación de escenarios que tengan en cuenta las diferentes variables que les afectan, mejorar la productividad de nuestra la infraestructura del transporte, reduciendo los impactos ambientales asociados y mejorando la experiencia de los viajeros? Desde luego, la experiencia y el conocimiento de los organismos que están desarrollando el proyecto nos hacen ser optimistas con respecto a la respuesta afirmativa de esta cuestión.
Sin duda, una vez que en los últimos tiempos se ha invertido considerablemente en la infraestructura para el transporte terrestre, ahora queda mejorar la productividad y uso de esta infraestructura, para conseguir un transporte más sostenible y eficaz