Las actividades de conservación – ordinaria y extraordinaria – y vialidad de carreteras exigen una vigilancia de las mismas que obligan a las empresas responsables a contar con equipos de control que las recorran para comprobar elementos en mal estado, o sean capaces de reaccionar cuando son notificados por algún accidente o incidencia.
Sin embargo, teniendo en cuenta el avance tecnológico existente en la actualidad, ¿cómo se podría desarrollar un sistema óptimo para la gestión de incidencias y el mantenimiento de las carreteras que pudiera ser utilizado por las diferentes Demarcaciones de Carreteras del Ministerio de Fomento?.
En primer lugar, sería necesario tener geolocalizados los diferentes elementos que conforman el inventario de las carreteras, información que debería ofrecerse de forma abierta, y ser utilizada por las diferentes empresas concesionarias del sector correspondiente. Para aquellas zonas que todavía no cuentan con un inventario digitalizado, aquí les indicamos unos sencillos pasos a dar para realizar de forma sencilla la geolocalización, captura y carga de datos de inventariado de cualquier carretera.
Una vez contamos con estos datos informatizados, resulta imprescindible disponer de un sistema que permita realizar un control absoluto de este inventario, conociendo de cada uno de los elementos su estado de conservación, el último informe realizado, o su ubicación exacta. Disponer de esta información, usando sistemas como el referido en esta entrada de Tecnocarreteras, permitirá a los responsables del sector (Jefe COEX y su equipo de trabajo) conocer qué elementos del inventariado deben ser reparados, y cuáles hay que ir a comprobar, para poder tener en todo momento en orden su zona de gestión.
También resulta de especial importancia tener un sistema móvil asociado al sistema general, que permita realizar todas las acciones en tiempo real, por los operarios encargados del mantenimiento o informe del estado del inventario, para evitar pérdidas de tiempo.
Con respecto a la gestión de los accidentes e incidencias, la idea es muy similar. Resulta vital tener un sistema web donde poder registrar los accidentes o problemas existentes en la carretera, para poder priorizar la solución de los mismos, garantizando en todo momento el cumplimiento de los plazos de servicio marcados por las empresas, que garanticen un nivel de servicio óptimo. Igualmente, disponer de una aplicación móvil asociada, va a facilitar la notificación sobre la resolución en el acto de estos incidentes así como informar sobre problemas nuevos registrados y disponer en todo momento de una solución actualizada y real. Todo esto se puede conseguir con sistemas como la Agenda de Vialidad de Iternova, de la cual ya hemos hablado en otras ocasiones.
Estos sistemas mostrados previamente ofrecerían un escenario de gestión muy bueno para las empresas y administraciones, pero todavía se puede añadir un elemento que, sin coste añadido, pueda suponer un importante plus de eficacia para la gestión de las carreteras: hacer partícipes a los usuarios.
Teniendo en cuenta que cada día más los ciudadanos cuentan con teléfonos móviles inteligentes que les facilitan no sólo conectarse a Internet sino compartir toda la información de interés que desean, añadiendo además la ventaja de contar con localización (GPS), cámara de fotos y demás funciones, ¿por qué no permitirles que puedan notificar cuando detectan cualquier problema en la carretera?.
De esta forma, con una sencilla aplicación, se podría conseguir que cualquier ciudadano que viera una señal en mal estado, presenciara un accidente, o quisiera informar sobre cualquier elemento relacionado con las carreteras, pudiera incorporar esta información en la plataforma adecuada que, tras el visto bueno del responsable de la empresa de conservación del sector de la carretera, pudiera ser tenida en cuenta para su solución.
Con esto se ganaría tener un potencial equipo de control, seguimiento y visualización de lo que pasa en la carretera mucho más amplio, que permitiría notificar con más antelación cualquier problema surgido, lo que llevaría a una solución más rápida.
La idea tecnológicamente no es compleja, y es necesario que esta filosofía se vaya incorporando a los sistemas de gestión de carreteras, para aprovechar un recurso que, además no supone ningún coste extra.