Un moho capaz de diseñar redes de transporte muy eficientes de forma casi automática


La planificación de redes de transporte, tanto por carretera como ferroviarias, óptimas para comunicar las diferentes regiones de un país es un trabajo complejo que precisa tanto de expertos como de complejos softwares que analicen al detalle diferentes alternativas para obtener la mejor solución.

Siendo lo anterior cierto, un científico de la Universidad de West England ha demostrado que existe una forma muy sencilla de obtener redes de transporte muy similares a las óptimas, pero de forma casi automática y sin necesidad de complejos ordenadores ni sistemas, únicamente utilizando un moho mucilaginoso, de nombre Physarum polycephalum, que tiene unas características muy particulares: le encanta comer y odia la luz.

Conociendo bien estas debilidades, el equipo del científico se propuso realizar diferentes experimentos con él para poder determinar si era capaz de simular las redes de transporte desarrolladas en algunas regiones avanzadas. Para ello, inicialmente comenzó con la red ferroviaria de Tokio, para lo cual simuló el país, colocando montones de comida en las principales ciudades del mismo (con tamaños proporcionales), y a su vez, estableciendo zonas de iluminación relacionadas con la topografía del país, para evitar que la bacteria buscara siempre la línea recta para llegar a su comida. Este primer experimento demostró que los resultados obtenidos por el moho denominado como el protozoo ingeniero eran muy similares a los existentes en la red ferroviaria del país, a la que se había llegado después de muchos años y estudios de los ingenieros japoneses.

El análisis del mismo proceso en otras regiones como EEUU, Reino Unido o los Países Bajos también ha dado unos resultados similares, y el científico ya ha comenzado a trabajar en analizar los resultados obtenidos para regiones del planeta con menos recursos, de forma que se les pueda ayudar a desarrollar redes más eficientes de transporte, y todo ello con un coste bajísimo de planificación.

A modo de anécdota, comentar comentar que el experimento también se ha desarrollado en España, que además cuenta con la ventaja de que la ciudad principal está en el centro del país, con la ayuda del profesor de la Universidad Politécnica de Madrid, Ramón Alonso Sanz, y como se puede ver en la imagen que aparece junto al título del artículo, se forma una red de transporte muy similar a la existente, aunque eso sí, manteniendo Madrid y Extremadura sin ninguna conexión directa.

La verdad es que es destacable la precisión del hongo, que, como se puede comprobar, no dista mucho de la de los mejores ingenieros. A continuación, mostramos el vídeo del experimento.