El grupo de investigación del National Center of Excellence for Smart Innovations de la Universidad de Arizona está especializado en la investigación del clima y de sistemas de energía para el asesoramiento de gobiernos e industrias de todo el mundo. Recientemente han presentado las conclusiones de un estudio sobre efectos no deseados que pueden aparecer al usar pavimentos reflectantes para evitar el conocido como efecto «isla de calor» en las grandes ciudades.
El efecto «isla de calor urbana» o «Urban Heat Island (UHI)» en inglés, se trata de un fenómeno provocado por los materiales que proliferan en edificios, construcciones y vías urbanas como el hormigón y el asfalto que, de día, absorben el calor del sol y, de noche, dificultan su disipación, haciendo que se eleve la temperatura media en la ciudad.
Para mitigar este efecto, se ha apostado en muchos lugares por el uso de pavimentos reflectantes, en las calles y en los tejados de los edificios, que son capaces de reflejar la radiación solar y contribuir a la reducción de la temperatura y a evitar la formación de esa isla de calor.
El estudio «Unintented consequences» (consecuencias no intencionadas) que han presentado revela que el uso de este tipo de materiales puede tener algunos efectos colaterales que no son tan beneficiosos. Según los investigadores la reducción de la temperatura en la superficie usando estos materiales reflectantes tiene sólo efectos limitados sobre las capas de aire superiores de tal manera que el beneficio general es menor de lo esperado.
La radiación solar reflectada puede calentar los edificios colindantes, lo que requiere, en verano, de un mayor uso energético para la refrigeración de esos edificios. Por otra parte, en invierno, estos pavimentos que no absorben tanta energía del sol pueden acumular más hielo o nieve, haciendo necesaria más intervención humana para el mantenimiento de las vías. Además, el reflejo de las radiaciones UV pueden provocar efectos nocivos en las personas, principalmente en la vista.
La conclusión que el estudio propone es que no está probado que el despliegue a gran escala pavimentos de alta reflectividad sea del todo efectivo para evitar el UHI y que los responsables de urbanismo deben estudiar concienzudamente la necesidad de apostar por este tipo de soluciones.