Esta semana se ha celebrado el aniversario (cien años ya desde su nacimiento) de uno de los dispositivos más utilizados en nuestras ciudades para regular el tráfico y garantizar la seguridad de conductores y peatones: el semáforo.
Pocos sistemas han tenido una aceptación y uso mayor, y es que, plantearnos una ciudad sin semáforos es vislumbrar un escenario caótico que nadie desearía.
El primer semáforo eléctrico se implantó en la localidad estadounidense de Cleveland, desarrollado por un grupo de inventores de la región para dar solución a los numerosos accidentes que ocurrían en cruces de su zona. A Europa llegó la idea diez años después, pero no sólo se copió sino que se buscó mejorar el procedimiento, desarrollando un prototipo nuevo que estaba basado en una torre formada por cinco semáforos que gestionaban eficazmente la circulación del cruce, y aportaba importantes mejoras respecto a su versión previa.
Poco a poco se fueron introduciendo novedades, como las luces peatonales, o los mensajes y cronómetros integrados. En la actualidad, también se vive un fenómeno de modernización importante referida a los semáforos, y en esta misma web hemos tenido ocasión de ver importantes innovaciones presentadas en este campo:
- Los semáforos: Pasado, presente y futuro.
- Semáforos inteligentes
- Semáforos que se organizan de forma autónoma
- Sistemas de gestión optimizada de semáforos
Sin duda, el semáforo ha sido uno de eso inventos que han marcado una época.