Conseguir establecer un marco que permita la circulación segura de vehículos autónomos y tradicionales, y aprovechar todos los nuevos servicios inteligentes disponibles y conectados con tecnología 5G es el objetivo del proyecto AIVIA Orchestrated Connected Corridors.

En el proyecto participan las empresas Ferrovial, Microsoft, 3M y Kapsch TrafficCom, y nace con el objetivo de definir cómo deben ser las infraestructuras del futuro, donde la mayor seguridad, información y comodidad en el viaje sean premisas de obligado cumplimiento.

Para ello, se pretende contar con una red de banda ancha 5G a lo largo de la carretera, que permita la conexión de los sistemas tanto V2X (de los vehículos tanto con otros vehículos como con elementos de la infraestructura, señales u otros dispositivos), lo que permita tener una movilidad conectada y, por tanto, más segura.

Junto a ello se quieren incorporar los últimos sistemas y desarrollo tanto a nivel de señales (dinámicas y con iluminación variable a la luz del día), comunicación (con un sistema central que gestiona la información), y de uso avanzado de sistemas inteligentes de transporte.

Si hace unos días hablábamos de cómo tendrían que ser las carreteras en el futuro, parece que cada vez estamos más cerca de poder verlas en la realidad.