El sueño es una de las causas más comunes de accidentes en autopistas. Las características de estas vías, con largos tramos rectos en los que se pueden llevar velocidades constantes hacen que los conductores experimenten síntomas de somnolencia, sobre todo por las noches, en condiciones de cansancio acumulado o tras comidas copiosas.

Las autoridades siempre recomiendan hacer paradas cada cierto tiempo, tomar café o refrescos, especialmente aquellos que contengan cafeína y si aún así los síntomas no pasan, parar en los lugares habilitados a tal efecto para dormir un tiempo hasta recuperarse y evitar el peligro de accidente.

Unos investigadores franceses del Laboratorio del Sueño, la Atención y la Neuropsiquiatría (CNRS) en colaboración con científicos suecos han demostrado que la emisión de una luz continua de color azul instalada en el salpicadero resulta igual de eficaz que tomar un café para mejorar el estado de alerta durante la conducción por la noche. La idea de este descubrimiento es desarrollar unos dispositivos que instalados en los vehículos emitan estas señales lumínicas cuando se detecte que el conductor presenta síntomas de cansancio al volante. De esta manera serviría de método de prevención de accidentes, ya que a veces no resulta fácil en la noche encontrar un lugar para tomar una bebida con cafeína o parar a descansar.

La luz azul estimula unas células nerviosas especiales de la retina que están conectadas con las áreas del cerebro que controlan la excitación. De esta manera se reduce la segregación de melatonina que es la hormona que merma nuestra capacidad de atención por la noche.

Para los experimentos se han utilizado 48 voluntarios a los que se les ha hecho conducir más de 400 kilómetros en 3 noches de una misma semana. Monitorizando su estado de atención se les proporcionaban cafés con cafeína, otros sin cafeína (placebos) o se les exponía a la luz azul de una lampara LED instalada en el salpicadero. Con todo ello estudiaron las veces que pisaban de forma inapropiada las líneas de delimitación de los carriles. Los resultados obtenidos demuestran que la exposición a la luz azul mientras se conduce es tan eficaz como el café en la lucha contra el sueño.

Quizá en un futuro cercano este experimento tenga su aplicación práctica en los vehículos comercializados y permita reducir el número de accidentes causados por el cansancio y el sueño.