En la gestión de la mayor parte de las carreteras intervienen diversos agentes, como son los pertenecientes al órgano gestor de la carretera, las empresas encargadas del mantenimiento, empresas auxiliares para la gestión, etc.
Por otra parte, es normal que la red de carreteras a explotar se divida en diversos Sectores de Conservación, hecho que amplía el número de intervinientes.
Con esta división en Sectores se gana en operatividad, pero para el Órgano gestor de la carretera surge desde el primer momento el problema de la heterogeneidad de las actuaciones y de la implantación de los Sistemas de Gestión, además de la atomización de la información (por ejemplo, los inventarios), con sistemas que a veces han resultado incompatibles entre sí. Otro problema que surge es la dificultad para coordinar las actuaciones entre los Sectores, en especial en el caso de la Vialidad, a causa de la opacidad de la información disponible por estos Sectores, muchas veces vecinos.
Está claro que son necesarias tanto la coordinación de las actuaciones como la uniformidad de los sistemas utilizados. Por ejemplo, el trabajo de confección y mantenimiento del inventario de elementos y la ejecución de los reconocimientos de estado de estos, al implantar el Sistema de Gestión de la Conservación Ordinaria, debe correr a cargo de los Sectores de Conservación, que trabajaban con utilidades informáticas en ámbito local. La compatibilidad (o en el caso más deseable, la uniformidad) entre estas utilidades es fundamental, pues es la única manera de poner en común sistemas y objetivos, además de permitir que el Órgano gestor de la carretera disponga de toda la información integrada (por ejemplo, el Inventario completo de elementos de la red).
Otro ejemplo: la Vialidad requiere mucha información sobre el estado de la red (estado de las carreteras, tráfico que soportan en un momento dado, condiciones meteorológicas, localización de equipos específicos, etc.). Esta información, que muchas veces es obtenida por un Sector concreto, debe poder ser compartida con el resto de Sectores que puedan necesitarla, y por supuesto con el Órgano gestor de la carretera.
Hoy día, la manera óptima de compartir y agrupar información entre distintos agentes en tiempo real, es la utilización de las nuevas tecnologías de la información y de Internet.
La implantación de “plataformas de gestión” en Internet permite además deslocalizar los Centros Operativos de toma de decisiones. Hoy debe ser posible poder dirigir la gestión de la explotación de la carretera desde cualquier lugar, en cualquier momento y por distintas personas, si fuera preciso, y todo ello sin necesidad de acudir urgentemente a un Centro de Conservación concreto en los momentos delicados.
Cuatro son los factores que deben tenerse en cuenta para una eficaz gestión de la explotación y del servicio a los usuarios de la carretera:
- Coordinación: las actuaciones entre todos los intervinientes deben estar coordinadas por el Órgano gestor.
- Uniformidad: los Sistemas de gestión deben permitir la compatibilidad entre la información que obtienen y la que generan.
- Integración: el Órgano gestor debe disponer de la información conjunta derivada de los Sistemas de Gestión de los distintos Sectores que dependen de él.
- Disponibilidad: la información integrada debe estar disponible en cualquier lugar y en cualquier momento, para todos los actores que participan en la gestión.