Ofrecer una nueva vida a los residuos de diferentes productos y usarlos con un nuevo fin es una medida que cada vez está siendo más habitual en diferentes campos, y especialmente en el sector de las carreteras.
Por ejemplo, en los últimos tiempos hemos visto en Tecnocarreteras diferentes proyectos que buscan dar una nueva vida a todo tipo de residuos (plásticos reciclados, residuos plásticos agrícolas, o neumáticos, entre muchos otros) utilizándolos en la construcción de nuevas carreteras.
En este caso leemos cómo investigadores de la Universidad de Córdoba han comprobado la utilidad del uso de escombros procedentes de obra para la fabricación de carreteras, probando su nuevo sistema (en tramos de la carretera CH-2 junto al aeropuerto de Córdoba), y empleando dos tipos de materiales reciclados: áridos reciclados mixtos (de tabiques y estructuras de las viviendas) y áridos reciclados de hormigón (de los cimientos de las casas).
Tras varios años de vehículos circulando por este tramo de carretera (desde 2009), se ha comprobado que la evolución de las mismas es incluso más favorable (en relación al desgaste) que las carreteras tradicionales, además de las otras ventajas asociadas.
Sin duda, algo todavía anecdótico, pero que es un reflejo de un camino que se debería tener cada vez más presente, el de reciclar, reaprovechar y tratar de respetar al máximo el medio ambiente.