Cada vez estamos más cerca de que los vehículos autónomos se puedan comercializar, ya que su tecnología está casi a punto, y se estima que para el año 2020 comenzará su comercialización.Sin embargo, surge una cuestión de vital importancia: ¿Están las infraestructuras adaptadas a las necesidades de los vehículos autónomos?
Según leemos en La Voz de Galicia, en España ya se están trabajando en proyectos que permitan adaptar las infraestructuras existentes a las nuevas necesidades, uno de los cuales está siendo desarrollado por parte de Ferrovial y el Centro Tecnológico de Automoción de Galicia (CTAG).
El objetivo es conseguir que el vehículo pueda estar conectado con la vía en todo momento, recibiendo el máximo de información posible para su toma de decisiones, y permitiendo que pueda aprovechar al máximo toda la tecnología con la que cuenta.
Para ello, es imprescindible dotarla de sensores, cámaras, radares y sistemas de comunicación, convirtiendo la infraestructura en una enorme red inteligente.
Para ello, se están habilitando pequeños tramos de autovía, a modo de espacios piloto, donde ir probando toda esta tecnología.
Es muy importante conseguir que, cuando el vehículo autónomo esté listo para su comercialización, también las infraestructuras estén adaptadas, y permitan sacarle todo el partido.
Veremos si se llega a tiempo, pero desde luego, es fundamental dar pasos en esta dirección, como los del proyecto comentado.