La colocación de radares de velocidad y cámaras para controlar el paso por los semáforos es una medida que suele estar acompañada de polémica en las ciudades: ¿Contribuyen realmente estas medidas a mejorar la seguridad en las calles, o simplemente son vías recaudatorias?
A esta pregunta podrían responder los responsables de la ciudad turca de Ordu, de 200.000 habitantes, que han visto cómo se han eliminado los tres accidentes mortales que ocurrían de media al mes desde la implantación de estos sistemas de control.
Una de las cosas más importantes que ha traído esta nueva tecnología es que, por una parte, los peatones se sienten mucho más seguros en las calles, y por otra, los conductores de la ciudad han comenzado a interiorizar que la reducción de la velocidad en el municipio está consiguiendo salvar un importante número de vidas.
Estas dos medidas no bastan para mejorar la seguridad global de los ciudadanos, pero van en una buena línea. La apuesta del municipio por implantar sistemas de gestión inteligentes de las carreteras y calles, realizar una conservación adecuada, y apostar por el uso de Sistemas Inteligentes de Transporte, va a convertir a esta zona en una de las más seguras de la región.
En el siguiente vídeo, se explica el sistema, y se muestra cómo ha mejorado la seguridad de los habitantes de la región.
https://www.youtube.com/watch?v=wYcar3oX1CU&feature=player_embedded