En materia urbanística creíamos haberlo visto todo – o casi – hasta que hemos descubierto cómo pretenden proteger en Londres la integridad física de los patos que saltan alrededor del Canal y del río Trust: Creando un carril exclusivo para patos.
La idea, chocante, pretende sobre todo alertar a los ciclistas y peatones de la posible aparición de los patos en estas zonas, para que extremen su precaución, y eviten atropellos y accidentes.
En España estamos más acostumbrados a las señales de peligro, aunque no podemos negar que, aunque sólo sea por la originalidad, seguro que los ciudadanos de Londres prestan más atención a los patos, gracias a esta curiosa iniciativa.