Llevar la presión adecuada en los neumáticos es fundamental para garantizar la seguridad al conducir. En caso de no llevar un inflado óptimo en las ruedas, se reduce peligrosamente su capacidad de agarre y aumenta la distancia de frenado del vehículo. Pero no solamente influye en la seguridad. Si la presión de los neumáticos no es adecuada hay otras circunstancias negativas que estaremos potenciando:
- Aumento del consumo de combustible
- Aumento de las emisiones de CO2
- Disminución de la vida útil del neumático
En resumen, que además de poner en riesgo nuestra seguridad, estamos influyendo negativamente en el medio ambiente y en nuestra economía.
Para verificar si la presión de los neumáticos es adecuada, la opción más común es hacer uso de los manómetros que encontramos en las estaciones de servicio. Algunos modelos de vehículos actuales son capaces de detectar la falta de presión en las ruedas y se informa al conductor de esa circunstancia en el cuadro de mandos.
Para conseguir que los neumáticos siempre tengan la presión adecuada, el fabricante de neumáticos Goodyear ha presentado un invento que permite que el neumático se hinche él solo (y en marcha) si, mediante un dispositivo alojado en el propio neumático, se detecta que se ha perdido la presión indicada. Aunque el sistema es complejo, el inflador se activa al detectarse una falta de presión en la rueda permitiendo que entre aire desde el exterior al interior con el propio movimiento de la rueda. El invento ha sido bautizado con el nombre de Air Maintenance Technology (AMT).
Aunque el fabricante ya había anunciado su desarrollo desde el año pasado, ha sido en el Salón de Vehículos Comerciales de Hannover (Alemania) celebrado este pasado mes de septiembre, en donde han presentado el modelo que ya puede ser comercializado. Tal ha sido el éxito de esta iniciativa que la revista Time lo ha incluido entre los mejores inventos del año 2012.
Con este tipo de neumáticos estaremos garantizando que circulamos siempre con la presión adecuada lo que puede evitar muchos riesgos, sobre todo para aquellos que no tengan la sana costumbre de revisar el estado de sus ruedas con la regularidad necesaria.