El nuevo modelo de conservación de carreteras que plantea el Ministerio de Fomento


Ayer veíamos cómo los Presupuestos Generales del Estado presentados para el año 2013 han sido especialmente duros con uno de los Ministerios más importantes, el de Fomento, que ha visto reducida su capacidad de inversión en un 14,8 % respecto a los del año pasado.

Uno de los aspectos más destacados de estos presupuestos es que desde el Ministerio de Fomento se ha decidido apostar por un nuevo modelo de conservación y explotación de carreteras, que permita mantener el servicio ofrecido durante estos años, reduciendo el gasto del mismo (se habla de una reducción en torno al 27 % de este gasto, con este nuevo modelo a implantar gradualmente hasta el año 2015).

Las medidas que se plantean desde el Ministerio para reducir este gasto, son las siguientes:

  • Mayor flexibilidad en asignación de medios materiales humanos
    • Se articularán fórmulas que permitan la dedicación no exclusiva del personal a tears concretas, para que, por ejemplo, la plantilla destinada a vialidad invernal pueda realizar otras tareas en otras fechas del año.
  • Asignación de recursos más eficiente
    • Se suprimirán 60 centros de comunicaciones, que tienen una utilidad marginal, con la aparición de los teléfonos móviles, lo que conllevará la supresión de las 300 personas que se ocupan de los mismos.
    • Se disminuirán los importes destinados a las partidas que se consideran «menos necesarias», como la «siega, limpieza, actualización de inventarios o elaboración de informes».
    • Se evitará la construcción de nuevas instalaciones innecesarias, reduciendo un 70 % esta partida.
  • Reducción de sectores consiguiendo economías de escala.
    • En la práctica, se pretende reducir en 21 el número de sectores en los que se divide la red de carreteras nacional, pasando de los 160 actuales a 139.
    • El objetivo buscado es tener una menor necesidad de recursos humanos y materiales, y generar economías de escala.
  • Mantenimiento de un nivel de servicio adecuado.
  • Máxima duración de los contratos

La verdad es que resulta preocupante contemplar cómo una vez más no se potencia el uso de una tecnología integradora, para facilitar la correcta gestión de los recursos asociados a las carreteras. En pleno siglo XXI, resulta incomprensible no aprovechar de una forma más adecuada los medios tecnológicos que tenemos a nuestro alcance, y establecer economías de escala también en estos, utilizando sistemas web para la gestión de las carreteras unificados para todas las Demarcaciones, aplicaciones abiertas, e información disponible en todo momento.

De igual forma, el nuevo modelo nos plantea varias dudas, como el problema de recortar importes destinados a tareas que son necesarias (sin un inventario actualizado es imposible poder gestionar la carretera), y nos sorprende al afirmar cosas que tienen tal sentido común, que resulta asombroso que no se hayan realizado hasta la fecha, como «evitar la construcción de instalaciones innecesarias».

Confiamos en que estas primeras iniciativas formen parte de un plan más ambicioso de rediseño de la gestión de la conservación y explotación de las carreteras, en el que se potencie el uso de tecnología para facilitar dicha gestión, y conseguir un uso mejor de los recursos.

Aquí dejo también un artículo con alguna idea adicional de acciones que se podrían tomar para conseguir mejorar la seguridad en nuestras carreteras, sin incurrir en costes adicionales.