Disponer de una red viaria adecuada es imprescindible para cualquier país en vías de desarrollo en su objetivo de alcanzar el equilibrio económico y social en todo su territorio. Las comunicaciones y los transportes de personas y mercancías facilitan el intercambio económico, cultural y educativo entre los distintos lugares, desde las ciudades hasta los núcleos rurales más apartados.
En la mayoría de los países africanos la red de carreteras se encuentra, por desgracia, en un estado muy precario. Cuando el ingeniero informático Joel Jackson llegó a Kenia en 2009, acompañando a una ONG, tomó conciencia de este importante problema, que dificultaba enormemente las comunicaciones entre las diferentes poblaciones.
Después de pasar un tiempo en el país, y siendo consciente de este importante problema, decidió dedicar sus esfuerzos a la fabricación de un vehículo que pudiera transitar por esas vías y ser comercializado por no más de 6.000 dólares. Y es que, aunque parezca increíble, en Kenia, los vehículos de segunda mano son muy caros debido a los impuestos y a los costes aduaneros, pudiendo llegar a costar en torno a los 60.000 dólares.
Con mano de obra local, y tras lograr la financiación inicial necesaria, fabricaron un primer modelo llamado Mobius One y posteriormente un segundo modelo Mobius Two que eliminaba todos los detalles superfluos para asegurar un coste limitado con la condición indispensable de resultar fuerte y duradero para adaptarse a las duras condiciones del estado de las carreteras de la zona.
La estructura del vehículo está formada por tubos de acero. Tiene un motor eficiente lo que sumado a su bajo peso lo convierte en un vehículo con unos consumos muy reducidos, muy necesario para recorrer sin necesidad de repostar las grandes distancias que separan a las localidades en las llanuras africanas. El fácil acceso a las piezas fundamentales del coche permite que sea cómodamente reparado por mecánicos locales en caso de avería, sin necesidad de ser enviado a talleres especializados de la marca.
Este vehículo tiene la intención de convertirse en un medio de transporte generalizado para la incipiente clase media de ese continente. Es una gran oportunidad para hacer accesible el automóvil a un precio razonable. Según su creador «el acceso al transporte significa acceso a la educación, a los servicios sanitarios y ese es el impacto social de este proyecto», esta es la gran aportación de este tipo de vehículo.
Iniciativas de esta naturaleza pueden suponer grandes avances para este tipo de países, poniendo a disposición de sus ciudadanos el acceso real a un medio de transporte tan necesario como el automóvil.