Como todos sabemos, la necesidad de realizar un ajuste económico en las cuentas de la Administración ha afectado especialmente al sector de las carreteras, que ha sufrido un drástico ajuste en las partidas presupuestarias destinadas a la conservación y rehabilitación de las mismas.
En estas circunstancias cobra más importancia que nunca el gestionar los recursos de una forma eficiente, para conseguir mantener unas infraestructuras conservadas en un estado correcto, que no ponga en riesgo la seguridad vial de los conductores. Si esto es aplicable a todas las acciones necesarias para la conservación de las carreteras, cobra una especial importancia en la rehabilitación de los firmes de la carretera, ya que entran en juego un importante número de factores que hay que valorar (con complejos modelos matemáticos que pueden determinar la evolución del estado del firme, y en consecuencia simular los costes de actuar pronto o más tarde), y que bien gestionados pueden suponer un importante ahorro.
Pero, ¿Cuáles son los elementos que hay que tener en cuenta para gestionar de una forma eficaz la rehabilitación de firmes de la carretera?
- 1.- Inventariado: ¿Qué información hay que almacenar?
- Características geométricas de la carretera, estructura y materiales
- Historia del firme (original y rehabilitaciones posteriores) y su rodadura
- Tráfico que soporta y las condiciones climáticas.
- 2.- Inspecciones y auscultaciones: ¿Qué hay que saber?
- Estado estructural, se conoce mediante inspecciones visuales (o con equipos avanzados) y el análisis de sus deflexiones.
- Estado superficial se obtiene mediante auscultaciones que ofrecen el coeficiente de rozamiento transversal (CRT), la regularidad superficial (IRI), la textura, fisuración e índice de roderas.
- 3.- Evaluación de los datos de las inspecciones: Los indicadores
- Deflexiones: Bueno (0 – 20), Regular (20-40), Malo (>40)
- CRT (percentil 50 por km): Bueno (>55), Regular (50-55), Malo (<50)
- IRI (percentil 50 por km): Bueno (<1,75), Regular (1,75 - 2,5), Malo (>2,5)
- Inspecciones visuales: Bueno (<10), Regular (10 - 40), Malo (>40).
- 4.- Modelos para estimar la posible evolución del estado del firme: Una vez se conoce el estado exacto de cada tramo de la carretera, entran en juego los modelos que evalúan (en función de múltiples parámetros) la posible evolución de ese firme (para determinar cuando es el momento idóneo para rehabilitar la carretera). Existen diversos modelos de evolución:
- Teóricos, basados en datos de deflexiones.
- Teóricos, basados en el cálculo a fatiga
- Empíricos, basados en datos de tramos similares con distinto tráfico.
- Empíricos, basados en series históricas de datos de un mismo tramo.
- 5.- Simulación de alternativas para determinar las operaciones de rehabilitación a realizar:
- La ventaja de contar con un Sistema de Gestión de firmes es que permite analizar multitud de opciones diversas, valorando todas las alternativas y proponiendo aquellas que optimizan costes y recursos.
- Con un tramo de carretera deteriorado caben diferentes alternativas, desde las de tipo preventivo, que permiten “retroceder” en el modelo de deterioro, hasta las de tipo correctivo, efectuadas cuando el firme ya ha alcanzado un grado notable de deterioro y que generalmente consiguen rehabilitarlo a su estado inicial, pero con un coste notablemente superior.
- Es fundamental determinar las acciones más adecuadas en cada caso, y esto se facilita con la gran cantidad de información ofrecida por un sistema de gestión.